Soltando lastre.

De forma inconsciente llevamos sobre nuestra espalda una pesada mochila....es hora de ir soltando lastre.

 
A medida que caminamos por el sendero de la vida, vamos llenando esa mochila poco a poco de sentimientos, pensamientos, formas de ser...y todos son inservibles porque nosotros avanzamos pero nuestra carga se queda obsoleta, y cuanto más innecesaria es..más nos aferramos a ella, porque nos resulta tan familiar...

Cuando somos pequeños ya nuestros padres, el entorno, la sociedad....nos llena la mochila de miedos, creencias, obligaciones...y comenzamos a acarrear una mochila llena sin pararnos a pensar si lo que llevamos nos resulta útil, beneficioso o forma parte de nuestro ser y pensar. Y a medida que avanzamos y vamos creciendo, la mochila se carga aún más con otro tipo de miedos, inseguridades, creencias...vamos mezclándolo todo en la mochila...

....es cómo si en pleno verano llevásemos en la maleta

 los guantes, la bufanda y el trineo...

¡por si nieva!

¿Por qué entonces llevamos nuestras mochilas tan cargadas si es evidente que la mitad de las cosas ya no las necesitamos?

 Actuamos tan inconscientemente que es necesario vaciar nuestras mochilas, y no sólo aligerándolas desprendiéndonos de lo inútil, sino también renovándolas llenándolas de cosas bonitas, útiles y necesarias.

Nunca es demasiado tarde para comenzar a aligerar las mochilas, y realmente llevar lo que necesitamos.